Descubrir el Parque de La Muela de Castronuño es encontrase frente a frente con la inmensidad del Duero, cuyo cauce a su paso por la villa toma forma de alegre y cómplice sonrisa, integrándose en un paisaje natural con sorprendentes paletas de color, que varían dependiendo del ciclo estacional.
Visitar Castronuño es ser recibido con los versos del poeta, relajarse divisando el suave y refinado vuelo de la garza imperial, es sentir los latidos de la historia a través de su testigo mudo, el templo tardorrománico Sta. M.ª del Castillo (s. XIII), y es respirar la esencia de la naturaleza en estado puro de la reserva natural Riberas de Castronuño-Vega del Duero.
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